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La elección del manillar correcto es un paso imprescindible en la configuración de nuestra moto off-road. Un manillar adecuado, siempre marcará la diferencia y nos ayudará a disfrutar de una conducción más cómoda y eficiente.

De nada vale contar con el motor más potente del mercado, si no sentimos que tenemos el control absoluto detrás de los mandos.

El manillar será siempre el elemento principal de nuestra montura y condicionará en gran medida nuestra postura a la hora de pilotar.

Actualmente, el mercado de los manillares offroad cuenta con una gran oferta y variedad para cumplir con la demanda y las necesidades de cualquier tipo de piloto. Por eso, es muy recomendable tomarse unos minutos y estudiar bien nuestras necesidades, antes de decantarnos por un modelo en concreto.

Aquí os explicamos las principales diferencias existentes entre los modelos más usados actualmente.

Tipos de manillares de moto  

El primer aspecto a tener en cuenta, será siempre el material de construcción. Por un lado, el acero, dominó el sector hace algunos años y aún hoy sigue utilizándose en modelos infantiles y las gamas más económicas. Este tipo de manillares, resultan rígidos y apenas filtran las vibraciones. Siendo al mismo tiempo, más propensos a doblarse en caso de caída. No obstante, se trata de los manillares más económicos que pueden encontrarse hoy en día.

Dicho esto, no cabe duda de que actualmente, el aluminio es el material por excelencia en la fabricación de manillares MX. Sus cualidades naturales y gracias a la combinación de estos con diversas aleaciones y tratamientos, dan lugar a manillares más ligeros a la vez que rígidos y resistentes.

La segunda cualidad más importante a la hora de elegir nuestro manillar perfecto, sería la rigidez, que a su vez está directamente relacionada con el grosor del tubo empleado para su fabricación.

 

Antiguamente, el diámetro estándar era de 22mm y contaba con una barra de refuerzo para mejorar la firmeza del mismo. Hasta que en 1991, la marca norteamericana Pro Taper, lanzó al mercado por primera vez un manillar con 28mm de diámetro en su parte central y que pese a no contar con barra de refuerzo, ofrecía unas mejores prestaciones frente a sus competidores.

Hoy en día, algunos fabricantes, combinan el uso de diferentes diámetros, en busca de una rigidez aún mayor. Por ejemplo, el modelo Renthal Twinwall, de 28 mm con barra de refuerzo central o los manillares Easton que ofrecen manillares con hasta 35mm de diámetro central.

 

Cuanto mayor sea la rigidez, mayor será la precisión en la conducción y menores las vibraciones.

Los manillares de 28 mm son más resistentes en caso de caída, aunque resultan más pesados y en carreras largas, pueden producir mayor agotamiento y una conducción menos cómoda que los manillares de 22mm.

Medidas de los manillares de moto

¿Sabías que, pese a su aparente sencillez, los manillares cuentan con hasta 6 parámetros diferentes de medición?

ANCHURA:

La distancia entre los dos extremos de las dos puntas del manillar. Para motos grandes, encontraremos manillares que van desde los 795, hasta los 810 mm. En motos infantiles, las medidas estarán comprendidas entre 715 y 750mm.

ALTURA:

Esta medida hace referencia a la altura total del manillar en el plano vertical, desde el anclaje a las tijas. Medidas que suelen rondar entre 70 y 100 mm. Aunque en manillares de freestyle o rallies pueden llegar hasta los 120 mm.

ELEVACIÓN:

En este caso, también mediremos la altura pero sólo desde la zona de las tijas hasta el segundo nivel del manillar, donde empiezan las puntas.

ANCHO DE TIJAS:

Esta será la zona en la que unimos el manillar a las tijas. Afecta principalmente a la rigidez de la pieza. Cuando más largo sea el tramo, más duro será el manillar.

CURVATURA:

Distancia en el plano horizontal, entre el extremo de las punteras y la barra central del manillar. Las curvaturas que podremos encontrar en el mercado, estarán comprendidas entre los 50 y 70 mm. Cuanto mayor sea esta medida, más cerca estarán las punteras del piloto.

LARGO DE PUNTERAS:

Se refiere a la medida de la zona donde se instalan los puños, los mandos, etc.

El diámetro del tubo en esta zona será siempre de 22mm, aunque el diámetro central sea superior.

Algunos manillares como los Pro Taper, cuentan con marcas guía específicas, que indican por dónde debemos recortar las punteras, en caso de querer modificarla y variando por consiguiente el ancho total.

¿Qué manillar escoger?

Lo primero que debemos destacar en este punto es que la elección del manillar siempre será una cuestión muy personal y subjetiva, basada sobre todo en los gustos personales del piloto.

No existe ninguna norma universal al respecto. En este caso, la experiencia es un grado y será necesaria para ir encontrando poco a poco el manillar que más se adapte a nosotros y nuestro tipo de conducción.

No obstante, si podremos seguir algunas directrices que nos ayudarán a la hora de elegir.

Por ejemplo, en aquellas disciplinas en las que sea necesario conducir de pie durante mucho tiempo, como el enduro o raids, como norma general, resultará más cómodo un manillar alto que acompañe a la postura del cuerpo.

Sin embargo, en motocross, aunque también se pilota de pie, generalmente la postura será más encorvada que en las disciplinas mencionadas anteriormente, por lo que un manillar más bajo será más adecuado a la hora de curvear y mantener una postura equilibrada en los saltos.

La elección de la curvatura también dependerá del estilo de conducción. Para aquellos pilotos que lleven los codos muy elevados la mayor parte del tiempo y mantengan una posición de ataque constante, lo más recomendable será un manillar con poca curvatura, pudiendo mantener los brazos y muñecas, mejor alineados.

Así mismo, un manillar con las puntas más cerradas, beneficiará a aquellos pilotos que lleven los brazos menos elevados y piloten más sentados atrás.

Por otro lado, un manillar más ancho favorecerá la estabilidad en recta, a costa de perder eficacia y comodidad en las curvas.

La rigidez, será también un factor clave a tener en cuenta.

Los manillares sin barra tenderán siempre a ser menos rígidos que aquellos que si la tengan. Primando el confort, sobre la precisión.

No obstante, debemos tener en cuenta que pese a que los manillares con barra, son más precisos, siempre serán más susceptibles a una rotura y como ya sabemos, con un manillar doblado, generalmente se puede acabar la carrera, con uno roto…

A excepción del piloto español, Joan Barreda, que fue capaz de terminar una de las etapas del Dakar 2015 con su manillar partido en dos.

Por último, una recomendación a nivel usuario. Los manillares siempre deberán resultar cómodos, tanto al ir de pie, como al ir sentado. Por eso, nunca cometáis el error de no probar vuestro futuro manillar en ambas posiciones.

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ale.garciamontes
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