Los simuladores cada vez replican la realidad de manera más fehaciente. En multitud de actividades humanas gozan de un gran protagonismo, ya sea en el entrenamiento de pilotos de aviones o de F1, por poner dos ejemplos. Incluso, algunos científicos se preguntan si nuestra realidad no será más que una simulación…
Estamos entrando en terreno delicado, así que vamos a volver a la “realidad”. En este caso a Yamaha y a su Motolator (vaya nombrecito). La marca ha declarado que: “Motolator es un simulador creado por Yamaha capaz de reproducir un gran número posiciones para realizar chequeos durante el desarrollo (de un modelo)”.
Yamaha Motolator
“Admite muchos cambios pues se puede alterar el triángulo formado por el asiento, manillar y reposapiés. Por otra parte, el acelerador, los frenos y el cambio se accionan como si se tratase de una moto de verdad. El Motolator facilita el desarrollo de los modelos Yamaha al permitir a los equipos que realizan el trabajo probar con rapidez ideas y piezas durante el estado de prototipo”.
Gracias al Motolator la marca tiene la capacidad de realizar distintas pruebas en lo que a la ergonomía se refiere de forma casi instantánea, sin necesidad de partir desde cero con un nuevo prototipo. Otra característica digna de destacar es que el “simulador” monta un acelerador real, al igual que el sistema de frenado y la caja de cambios, como si se tratase de un vehículo de verdad. Esta “moto” (sin ruedas) permite simular multitud de posiciones del piloto e incluso realizar ajustes de forma eléctrica. Se puede variar la altura, longitud y el ángulo del manillar. Además de la anchura y altura del asiento. El Motolator hace posible jugar con la geometría para simular que se está sobre una hi-sport, deportiva o custom. En definitiva, con este artilugio Yamaha puede probar multitud de posiciones y piezas sin tener que recurrir cada vez a un nuevo prototipo. Lo que supone un importante ahorro de tiempo y dinero.
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