Ahora lo sabe, para siempre, el de Coventry: no se llama Marc, ni Valentino. Ni siquiera se llama Andrea Iannone, que en el Gran Premio de Italia de 2015 movió su entonces Ducati oficial como una coctelera en la parrilla, con el semáforo en rojo; y no hubo bemoles entonces de hacerle pasar por los garajes a un italiano asalariado de Borgo Panigale con cien mil energúmenos gritando “al Mugello non si dorme” en las gradas.
Es curioso cómo la memoria flaquea para casi todo. Aquel segundo puesto en Italia y el podio de Australia (ambos justo delante de Rossi) restaron unos puntos de oro a Valentino, que perdió su asalto al décimo título por tan solo cinco tras Lorenzo.
Pero volvamos a la actualidad y a la salvajada perpetrada contra Cal Crutchlow el pasado fin de semana en el Gran Premio de Argentina. Y a unas declaraciones del inglés que yo suscribo al cien por cien:
“Si me hubiera adelantado en la salida como un loco evidentemente la sanción es procedente. Pero nadie en absoluto, ni de mi equipo ni de fuera de él, ve que me haya adelantado en la salida. Sólo los comisarios. Si miras la cámara lateral, que es la que me han enseñado, no me muevo ni un centímetro. Lo que hago es balancearme, pongo el peso del cuerpo hacia delante, no es que suelte el embrague. Es una broma, es ridículo. Cuando fui a Dirección de Carrera me pasé diez minutos quejándome y tratando demostrarles que no me había movido. Y no me dijeron una sola palabra. Se han cargado el gran premio de 50 personas y el mío con una decisión estúpida. Y me han quitado la oportunidad de subirme al podio.”
Lo del podio lo pidió su equipo en los despachos al acabar la carrera. Otro sainete más, que se suma al del deflector trasero y que sigue echando porquería sobre un reglamento que hace aguas. Y sobre la gente que lo aplica, también. En este caso, con el agravante de ser Freddie Spencer, nada menos, el implicado en la sanción a Cal. El británico no se cortó señalándole:
“Resulta que han fichado a alguien que teóricamente entiende de carreras y que es capaz de ofrecer el punto de vista de los pilotos. Y debería entender de eso. No creo que Spencer hubiera penalizado por esto ni a Marc ni a Vale ni a Dovi. No lo habría hecho, así de simple. Él dice que sí, pero yo no me lo creo. Lo que está claro es que se ha ganado un papel protagonista. En la próxima Comisión de Seguridad, cuando nos pongan las imágenes los demás pilotos se reirán y Spencer perderá todo el respeto.”
Con el deflector se ha puesto en entredicho la figura de Danniel Aldridge, pero en este caso una leyenda de MotoGP como Spencer puede ver su imagen arrastrada por el barro de las carreras de hoy en día. Y una cosa más: el precedente “tempranero” que se sienta para el resto de temporada. Porque si uno de los gallos que se esté jugando el título, en alguna carrera del triplete o en Cheste, mueve la moto como Cal y no es penalizado, entonces sí que vamos a tener fiesta. Porque, en este caso, desde luego, la gente tendrá memoria suficiente. Y Crutchlow, un micrófono, además.
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