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0 El proyecto, de alguna manera, es una continuación de la Ducati J63 que Revival Cycles había hecho en 2015. Para el chasis se eligió un conjunto tubular de acero, al que se le añadió el bicilíndrico en V de procedencia Ducati y ruedas de radios. Una de las piezas más trabajadas de la 1100 Fuse es el basculante mecanizado y construido con una máquina de control numérico. Te animamos a que le eches un buen vistazo porque es, cuanto menos, diferente.
La carrocería es una sola pieza, es decir, tanto el depósito como el asiento forman parte de la misma unidad y es otro de los rasgos más característicos de la 1100 Fuse. Construir la carrocería supuso un reto técnico, al estar hecha a mano a partir de un único trozo de aluminio. A ambos lados va pintada de rojo y lleva una banda central cromada. El contraste entre el color y la tonalidad plata del cromado es, pensamos, espectacular. Los creadores del proyecto aseguraron que lo más difícil de fabricar fue la tija de la dirección y el manillar, porque en realidad forman una unidad. Algo que no recordamos haber visto nunca antes. Lo que serían las piñas van alojadas en los puños de cuero.
Ducati de medio millón de dólares
A pesar de su imagen, digamos, clásica, la Ducati 1100 Fuse va alimentada por inyección electrónica. Los artesanos escondieron la mayoría de los cables para que el resultado fuese lo más limpio posible. El trabajo en los cuerpos de la inyección ha sido exhaustivo y pese a funcionar como una moto moderna, da la impresión de ir alimentada por unos clásicos carburadores.
En el programa Jay Leno’s Garage se ha podido ver a la Ducati 1100 Fuse que, como no podía ser de otra manera, ha conquistado al famoso presentador estadounidense, poseedor de una de las mayores colecciones de coches (y algunas motos) del mundo.
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