Suzuki Burgman eléctrico: más cerca

La noticia de que Suzuki dejaba de participar en el Mundial de MotoGP fue un jarro de agua fría para los aficionados. En el escueto comunicado oficial la marca decía: “es necesario concentrar nuestros esfuerzos en los grandes cambios que se están produciendo en la automoción. Suzuki debe reducir de manera drástica los costes relacionados con la competición para utilizar esos recursos económicos y humanos en el desarrollo de nuevas tecnologías”.

Suzuki había mostrado ya algunos concept en forma de motos eléctricas. Las informaciones llegadas de Japón apuntan a que la marca tiene ya casi a punto un scooter movido por baterías. Este vehículo no solo ha sido pillado durante algunas pruebas sino que Suzuki ha patentado algunos aspectos del scooter. A pesar de que la compañía japonesa no ha sido en los últimos años la que más ha sorprendido en el panorama tecnológico, no ha faltado el prototipo de un Burgman alimentado por pila de hidrógeno. Pese a que esta tecnología todavía se encuentra en sus inicios, en especial en cuanto a las infraestructuras pues apenas hay hidrogeneras o hidrolineras en el mundo.

Suzuki: ¡Burgman eléctrico fabricado en India!

La apuesta por un scooter eléctrico es mucho más segura que adentrarse en terrenos poco transitados como el hidrógeno. Suzuki ha usado como base su Burgman 125, el pequeño de una saga que gozó de mucho predicamento en el mercado. El scooter se ha visto en India, país donde también se fabricaría. La marca tiene una enorme influencia en esa gigantesca nación, en especial en el sector del automóvil. El rendimiento de las baterías se ve afectado de manera negativa por las temperaturas extremas y, en el caso de India, el sofocante calor ha supuesto un reto a la hora de conseguir una aceptable autonomía.

En las patentes presentadas en Japón se puede apreciar que el motor eléctrico va bastante adelantado en el chasis, justo debajo del asiento. A pesar de que los cuatro fabricantes japoneses han acordado un estándar para baterías extraíbles, en el prototipo Suzuki ésta va fija en la zona donde habría estado el hueco para el casco. En este aspecto hay dos escuelas de pensamiento: aquellos que proponen baterías extraíbles (se cambian la vacía por una llena como si fuese una bombona de butano) y los que optan por las fijas (como ocurre en la mayoría de los automóviles eléctricos).

Los scooter son vehículos ciudadanos y en ese ambiente la tecnología eléctrica es imbatible. Les ha costado un poco pero los fabricantes nipones comienzan a adoptar esta tecnología después de haber sido uno de los líderes en los scooter movidos por motores de explosión. Suzuki no quiere quedarse atrás (el mercado no perdona), así que más temprano que tarde veremos el Burgman eléctrico.