El flamante piloto de Ducati Gresini se mostró, como siempre, extrovertido y accesible en esta reunión con periodistas en la sede de Rodi Motor Services mientras explicaba de qué manera estaba asimilando los cambios que han sucedido en su entorno en el 2022. Su cambio de residencia a la capital de España y su fichaje por la marca de Borgo Panigale representan una verdadera revolución para el de Cervera tanto en lo personal como en lo profesional.
De 2022 a 2023
Siempre, al terminar un año, se impone un pequeño balance… así que la primera pregunta es de rigor: ¿Cómo estás y cómo valoras el 2022?
Ha sido un año que se me ha hecho largo, especialmente la segunda parte y que por momentos me ha puesto mentalmente al límite pero estoy bien y muy ilusionado con lo que viene. Ha sido una de las temporadas que he terminado más cansado física y mentalmente. Obviamente las cosas no han salido como me hubieran gustado así que habrá que trabajar aún más para revertir eso y representa un plus de motivación.
Un año con muchos cambios que comienza con tu cambio de residencia a Madrid. ¿Ya has empezado a “descubrir” Madrid?
He empezado a “descubrir” Madrid a partir de la última carrera. Durante el año nada; da igual Barcelona que Madrid o Sevilla porque estás en modo carrera y todo es gimnasio, bici, deporte…
Pero a partir de noviembre sí he comenzado a disfrutar Madrid porque es una pasada la oferta de todo tipo que tiene… aunque yo no soy muy de grandes ciudades. Pero la capital de España tiene algunos rincones preciosos.
¿La adaptación al ritmo madrileño cuesta más viniendo de Cervera?
Bueno, me ha ayudado mucho que vivo en una parte muy tranquila, entre Pozuelo y Boadilla, así que la adaptación es gradual. Si quieres el ritmo de la gran capital la tienes a 20 minutos y si quieres tranquilidad pues también la tienes. La verdad es que sólo puedo decir que me he sentido muy bien acogido y estoy muy a gusto.
¿En qué te ayuda haberte instalado en Madrid? ¿Qué te ofrecía que no tuvieras en Barcelona?
Especialmente la comodidad de tenerlo todo más cerca, más a mano. Dietistas, Fisios… e incluso el aeropuerto. Vivir en Madrid ahorra notablemente el tiempo de vuelos. Más allá de eso no me ha cambiado nada porque mi estilo de vida en Madrid es el mismo que el de mi vida en Barcelona. Mis rutinas son las mismas… y eso era lo que más me preocupaba, que el cambio de residencia afectara a mis rutinas pero no ha sido así.
¿Y has notado una manera diferente de vivir el interés por MotoGP en una capital y otra?
No, sinceramente no. Puestos a afinar te diría que la gente de la moto de Madrid es un poco más abierta, en el sentido de que enseguida animan a compartir su afición y a socializar pero en general es la misma pasión. Y ha sido una sorpresa agradable porque, de momento, no hay ningún piloto madrileño realmente de referencia ni hay un circuito a través de lo cual canalizar esa pasión y sin embargo la afición es muy fuerte.
Rutinas y entrenamiento
¿Y a ti te perjudica que no haya cerca un circuito de primer nivel como Barcelona, Aragón, Valencia o Jerez?
Profesionalmente no porque yo, por ejemplo, apenas entrenaba en Montmeló durante el año. He entrenado mucho más en Jerez o Aragón que en Cataluña. Mi entrenamiento habitual es más karting y motocross y de eso hay de sobras en Madrid y en cuanto a mi rutina es muy simple; me levanto, desayuno y dedico toda la mañana a hacer cardio. En la comida algo ligero pero energético y por la tarde gimnasio.
Todos los pilotos sois verdaderos atletas de élite. ¿El motociclismo es cada vez más físico y menos técnico?
En cuanto a técnica yo creo que igual pero el nivel físico sí ha aumentado espectacularmente. Yo diría que en paralelo a lo que corren las motos. Cada vez necesitas más porque las motos cada vez van más deprisa, frenan más tarde… sube el rendimiento y sube la exigencia física porque la moto te exprime más. Se miran más todos los detalles para que, una vez encima de la moto, no tengas que pensar en tu físico y preocuparte de si aguantará o no. Yo me centro especialmente en mis puntos débiles que son la espalda y el cuello ya que tiendo a sufrir un poco más por ahí pero trabajo mucho para reforzarlo. He conseguido acabar las carreras cansado pero no agotado ni destrozado y eso quiere decir que vamos por el buen camino.
Otro de los cambios a los que te enfrentarás en el 2023 es esa nueva ronda de carrera el sábado. ¿Como piloto directamente implicado cuál es tu opinión? ¿Es doblar el riesgo o doblar el espectáculo?
Pues ambas cosas pero mira, si no lo probamos no sabremos si funciona. Tenemos que estar abiertos a probar cosas para que la gente se vuelva a enganchar como antes y vuelva a crecer el interés tras la marcha de referentes como Valentino, Jorge, Dani… y la ausencia de Marc.
Si Dorna cree que esta es la manera pues vamos a probarlo y que por nosotros no quede.
Evidentemente si vemos que no funciona, que obliga a un sobresfuerzo peligroso pues lo hablaremos. Para eso tenemos unas comisiones los viernes por la tarde…
Quizás lo más duro será el no desconectar el sábado y seguir con el chip de carrera hasta el domingo pero será interesante. Es un cambio muy importante en el formato pero es obvio que los aficionados prefieren ver una carrera a un entrenamiento.
Y el tercer gran cambio es que llegas a Ducati Gresini…
Los cambios siempre ayudan y espero que sea así también en este caso. Es un salto importante porque las Ducati son las motos más rápidas del campeonato y sobre ese punto no hay duda. Las motos corren. Además en Ducati tienen las cosas muy claras sobre lo que quieren y cómo lo quieren; conocen perfectamente el estilo de pilotaje de cada uno de sus pilotos y en mi opinión llevar la moto del 2022 es una ventaja añadida porque llegas con muchísima información ya acumulada a la hora de poner la moto a punto. Muchas ganas de empezar a trabajar y muy agradecido con la recepción que me han dado en Borgo Panigale y la gente de Gresini.
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