Lo de hoy en Brno ha sido una nueva demostración de que Marc Márquez se encuentra en otro nivel, con una calidad extraordinaria, incluso en terreno menos favorable como era la pista checa, donde Ducati tenía esperanzas. Lo intentaron todo, con una estrategia de neumáticos a la contra, pero no hubo forma de plantarle cara. Márquez ha dominado de principio a fin, en unas circunstancias nada sencillas por lo condicionantes que han tenido a lo largo del fin de semana del Gran Premio de República Checa.
Las dudas generadas por la lluvia caída antes de la carrera forzó un retraso de casi 45 minutos, una decisión más que acertada de la Dirección de Carrera, puesto que sólo había una reducida zona del circuito donde había humedad, lo que hacía incompatible cualquier opción, ya fuera con gomas de agua o gomas de seco, y habría resultado especialmente peligroso.
Márquez disfruta ahora de 63 puntos de ventaja, y la siguiente parada va a ser en Austria, que desde que regresó al calendario del Mundial en 2016 sólo ha conocido ganadores de Ducati: Iannone, Dovizioso y Lorenzo. ¿Conseguirá la marca italiana mantener la tendencia? No olvidemos que en los dos últimos años Márquez llegó a pelear por la victoria hasta la última curva.
A Ducati, al menos, le ha quedado la satisfacción de ver dos de sus motos en el podio, con Dovizioso y Miller. Sin duda que es, de momento, la única alternativa al binomio Márquez-Honda. Suzuki estuvo cerca con Alex Rins, pero tuvo que ceder en las últimas vueltas, y Yamaha regresó a los fantasmas del pasado. Rossi fue el mejor, sexto, con Quartararo tras él.
Viñales fue décimo después de ceder muchas posiciones en la salida. Y no fue una cuestión de la parrilla de salida húmeda, porque Rins también arrancaba desde el lado derecho y no tuvo dificultad para mantener la cuarta plaza en la primera curva y engancharse al grupo delantero.
En Brno se ha completado otro histórico triplete de los pilotos españoles, como en Montmeló, con los tres ganadores, Canet y los Márquez, liderando en cada una de las categorías del campeonato. El objetivo es repetir los éxitos de 2010, 2013 y 2014.
Moto2: Alex Márquez se escapa
Cinco victorias en las seis últimas carreras, ésta es la hoja de servicios de Alex Márquez en los últimos Grandes Premios. Primero de principio a fin, sólo perdió la primera posición durante unos cientos de metros, en la primera curva, cuando fue adelantado por Sam Lowes, pero enseguida recuperó el primer puesto y dijo adiós. Fabio DiGiannantonio fue el único que intentó seguir sus pasos, y por momentos parecía capaz de responder, pero la consistencia de Márquez fue impresionante. Y si a ello le sumamos el error de Thomas Luthi, que se cayó muy pronto, ahora disfruta de una neta ventaja al frente de la clasificación: 33 puntos.
Dos “rookies” en el podio de Moto2 es una buena noticia. DiGiannantonio y Bastianini encabezan la regeneración de la categoría, en la que en los últimos años le influencia de los veteranos pesa bastante, pero algo está cambiando. Y el hecho de que la segunda Speed Up esté en el podio demuestra que hay alternativas viables a la hegemonía de Kalex, y eso es bueno para el campeonato.
Gran carrera de Jorge Navarro, que saliendo retrasado llegó al tercer puesto, pero el ritmo de Bastianini fue brutal, y el valenciano no tuvo capacidad para responderle en la última vuelta. Mal día para Augusto Fernández, que se superó en la carrera tras un fin de semana complicado. Ahora Navarro y Fernández están empatados en la tercera plaza de la tabla.
Moto3: Lección de Canet
La carrera de Moto3 ha sido una verdadera lección por parte de Arón Canet, que ha sabido manejar muy bien la situación, siempre atento y sin exponerse, y reaccionando en el momento oportuno, cuando llegó Lorenzo Dalla Porta y se puso en cabeza. Ahí se activó Canet, se mostró mucho más agresivo y atento, y en el momento crucial de la última vuelta supo ser más sólido y defender la primera posición hasta la bandera de cuadros. Segunda victoria del año, y de nuevo líder del Mundial.
Los favoritos al título empiezan a definir posiciones. Canet y Dalla Porta han dado un paso adelante; los demás han cedido ya demasiado terreno, y las aspiraciones de Antonelli, Ramírez o Arbolino pasan por el fallo de los dos primeros. Que uno se equivoque, pase; dos, no creo. Y viendo la seguridad con la que han rodado Canet y Dalla Porta, lo tienen difícil.
Es encomiable el esfuerzo desplegado por Niccolo Antonelli, tras calar el motor de su Honda en la salida de la vuelta de calentamiento, lo que le obligó a arrancar desde el “pit lane”. Pero al mismo tiempo el grupo se merece un tirón de orejas: que Antonelli llegara a pelear por la victoria demuestra la falta de ganas que se emplearon en el resto de la carrera, rodando la cabeza en 2’10”-2’11”, cuando la vuelta rápida fue 2’08”4. Una cosa es que faltara agarre, pero relajarse a ese nivel… No tienen sentido carreras en las que el 75% de la distancia es un pasar las vueltas sin más, y sólo hay 25% de competición pura. Para eso, hagamos carreras al sprint.
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