0 0
Read Time:3 Minute, 10 Second
Marc Márquez ha ganado en Japón y le ha dado a Honda el título de fabricantes. Pero para seguir triunfando, Honda no se puede permitir seguir mucho tiempo así.

La décima victoria de Marc Márquez ha permitido a Honda amarrar el título de fabricantes, algo que en Motegi era casi una imposición. “Esta mañana el presidente de Honda me ha dicho que tenía que ganar el título de fabricantes aquí”, confesaba Márquez, y así ha hecho, ha logrado la victoria y Honda se ha coronado, por 25ª vez, campeona de fabricantes gracias casi en exclusiva a Márquez, porque 350 de los 356 puntos que le han dado la corona los ha aportado Márquez, que sigue peleando solo contra todos. Ahora el siguiente objetivo es el título de escuderías, en donde el Team Ducati aventaja en 17 puntos al Repsol Honda, y tienen tres carreras por delante.

Márquez ha corrido al límite en Motegi. Lejos de lo que pueda parecer, ha tenido que adoptar una estrategia arriesgada. Ni se planteaba un final de carrera con Fabio Quartararo como el de Tailandia y San Marino, donde le dejó hacer para superarlo en la última vuelta. “Podía haberlo hecho como en Tailandia, pero ya se lo he hecho dos veces y no creo que hubiera colado una tercera”, confesaba Márquez. Por eso cambió el plan.

Y su plan, como el de muchos, era arriesgar en el inicio, arrancar con fuerza, marcar distancia y administrarla hasta el final de carrera. El esfuerzo añadido con el potencial de la Honda ha supuesto un gasto de gasolina excesivo, hasta el punto de que la alarma de consumo se ha disparado a dos vueltas del final. Por suerte para Márquez, el que estaba detrás era Quartararo y no Andrea Dovizioso, que ha llegado con los neumáticos mucho más frescos, pero le ha faltado poco para llevarse un buen susto, porque se ha quedado sin gasolina poco después de cruzar la meta, y ha entrado en el pit lane remolcado…

El cambio de temperatura, con la subida de unos pocos grados en comparación con la carrera de Moto2, ha hecho que muchos pilotos tuvieran que tomar una decisión de última hora en la elección de neumáticos. Quartararo optó a última hora por la goma blanda, una apuesta arriesgada que pone de manifiesto su madurez, su crecimiento como piloto que le lleva a adoptar decisiones valientes y a saber defenderlas, que es lo más importante.

Las Yamaha, que apostaron por el compuesto blando, acertaron a medias. Quartararo marcó la diferencia con su determinación en el inicio de carrera, mientras que Franco Morbidelli, con buen ritmo inicial, pagó su fogosidad inicial con una pérdida de ritmo en el tramo final. Justo lo contrario de Maverick Viñales, que no le cogió el ritmo a la carrera, y cuando lo hizo se encontró con un correoso Dovizioso y unos neumáticos que no eran capaces de responder. Una vez más, todo lo bueno que apunta el viernes y el sábado se queda en nada el domingo.

Y qué decir de Valentino Rossi. Esto suena a cambio de guardia, en Yamaha y en Honda, porque Jorge Lorenzo no levanta cabeza.

Está claro que el relevo y la apuesta de futuro en Yamaha es Quartararo, mientras que en Honda… Nadie lo sabe. No puede ser, no lo será Johann Zarco, porque lo que Honda necesita es un piloto de porvenir, no un contemporáneo de Márquez. Y ninguno de los Rookies de la categoría apunta alto. Sólo Quartararo. Más vale que se espabilen en Yamaha y lo amarren a tiempo. En 2021 es probable que asistamos al mayor vuelco en la parrilla del campeonato de los últimos años. Márquez está, literalmente, solo contra todos, y Honda no se lo puede permitir, necesita tener una bala en la recámara.

Happy
Happy
0 %
Sad
Sad
0 %
Excited
Excited
0 %
Sleepy
Sleepy
0 %
Angry
Angry
0 %
Surprise
Surprise
0 %
ale.garciamontes
ale.garciamontes@gmail.com

Average Rating

5 Star
0%
4 Star
0%
3 Star
0%
2 Star
0%
1 Star
0%

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *