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0 No hay duda que el motociclismo de competición en nuestro país está en racha. De hecho, en los últimos días varios han sido los pilotos que se han proclamado campeones del mundo. Manu González está entre ellos. Desde la pasada carrera en Magny Cours Manu es el campeón del mundo de SSP 300.
Empezando en la Copa de España de Velocidad, Manu recuerda su primera carrera con su 80cc en Alcarrás.
En la pasada temporada, antes de saltar al mundial de la misma categoría, el piloto madrileño lograba grandes resultados en SSP300 del Campeonato de España.
Son muchos los jóvenes que deciden competir en el FIM CEV Repsol, paso previo al Mundial de Moto2 o Moto3, pero Manu prefirió optar por la SSP300 dentro del Campeonato del Mundo de SBK. Según él, allí está más valorado, se encuentra muy cómodo y ve cosas muy positivas como empezar desde los 15 años y estar rodeado de muchos pilotos. De esta manera aprender a gestionar las carreras y pensar encima de la moto es una realidad dejando atrás ir a lo loco.
Al preguntarle por la diferencia entre SSP 300 y Moto3 Manu comenta “lo único malo que puede tener SSP300 es que es menos conocido que Moto3 pero a mí me ha ido bastante bien”
Su objetivo es dar el salto a SSP de la mano con Kawasaki; “Tenemos el apoyo de Kawasaki, con ayuda de fábrica. Se cerrará en los próximos días y haré el Mundial completo con la 600 cc”.
Al desayuno le acompañaron sus padres que han sido un apoyo incondicional desde el principio. Confesaban que nunca ha sido un sacrificio para ellos, ya que es el mundo que les gusta, aunque, según ellos confesaban, económicamente lo habían tenido que luchar. Ahora todo va mejor pero no quieren ¨creérselo¨ y prefieren seguir con los pies en el suelo.
En cuanto a su actividad del día a día Manu sigue compaginando los estudios con la competición, entrena dos o tres días en el gimnasio, hace bici estática en casa. Pero para entrenar en un karting debe hacer una hora de coche. Practicar MX lo tiene más fácil, tiene más circuitos cerca.
Según Manu, la pretemporada del año pasado fue la clave para conseguir el titulo; “Hicimos varios entrenamientos donde trabajamos muy bien. Llegué a la primera carrera como si ya hubiese corrido con esa moto un montón de carreras. Eso me vino muy bien, también para la autoestima”.
El piloto madrileño lleva dentro este mundo, según su madre, desde temprana edad solo pintaba circuitos, motos… Desde moto1pro le deseamos y confiamos que el próximo año esté repleta de éxitos.
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