La cueva del tesoro: 180 motos y 50 toneladas de repuestos

A veces soñamos con ganar la Primitiva o que nos toque el Gordo de Navidad. En el fondo sabemos que la ley de probabilidades dice que es casi imposible pero soñar es gratis… o como mucho cuesta lo que vale un boleto. Ello no quita que haya a quien le toca el Gordo… Podríamos decir que la empresa Hitchcocks motorcycles (evocador nombre si eres aficionado al Séptimo Arte) ha dado con el número premiado. En este caso una colección de más de 180 motos…

Para esto los sajones tienen hasta un término: barn find (literalmente, hallazgo en un granero). Ya sabes, vas a una granja perdida, espantas a las gallinas que están subidas a una manta llena de excrementos, y debajo encuentras una Brough Superior… o una Bultaco Lobito.

180 motos y 50 toneladas de repuestos

El tesoro Hitchcocks motorcycles consiste no solo en más de 180 motos, sino que a eso hay que añadir 50 toneladas de piezas sueltas. Todo esto se trajo a las Islas Británicas desde Estados Unidos, para lo que hizo falta el empleo de cinco contenedores de 12 metros cada uno. ¿Te imaginas?, suena el timbre y el portero dice por el telefonillo: “Buenos días, le traigo cinco contenedores llenos de clásicas”.

Entre las 180 motos hay modelos británicos de casi todas las marcas: AJS, BSA, Triumph, Norton, Royal Enfield… Los responsables de Hitchcocks motorcycles aseguran que solo el catalogar tantas motos antes de ponerlas a la venta les va a llevar mucho tiempo, quizá años… Esta empresa está especializada en servir motos y piezas de modelos clásicos de Royal Enfield: Interceptor, Indian Apache, Indian Fire Arrow, Fury, Continental.

Casi tan extraordinario como las 180 motos son las 50 toneladas de piezas: motores completos, velocímetros, tacómetros, ruedas, guardabarros… Solo en ruedas y neumáticos son más de 250 (aunque no estamos seguros de que los cauchos sirvan ya para mucho). Además de, como dice la persona que presenta el vídeo, “un mar de chasis”, más de 150 depósitos de gasolina… Habrá que juntar cada bastidor con su correspondiente propulsor, una labor entretenida.

Si te gustan las clásicas te prevenimos que ver el vídeo podría suscitar un deseo irrefrenable de ponerte en contacto con los responsables de Hitchcocks motorcycles para adoptar una de estas motos que esperan ser restauradas.