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0 Si estáis pensando en sacaros el carnet de conducir, no es un buen momento… Según explican desde la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) actualmente hay más de 300.000 alumnos a la espera de poder examinarse. Esto se debe a años acumulados de falta de personal con un servicio cada vez más precario que se ha visto agravado por la crisis del COVID-19.
Además es un problema que hace que se pierdan puestos de trabajo y no se movilice la economía (nunca mejor dicho) ya que a la venta de coches, seguros y demás gastos relacionados con el mundo del automóvil, el disponer de coche o no puede marcar la diferencia también en el acceso al mercado laboral.
Pere Navarro, Director General de Tráfico, ha reconocido que el estado de alarma ha impedido 286.000 exámenes prácticos y actualmente muchas Jefaturas provinciales están colapsadas con grandes listas de alumnos esperando para examinarse. Listas que continúan creciendo y acumulándose.
Enrique Lorca, presidente de la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE): “La situación cada vez es más insostenible; la falta de examinadores y personal administrativo en las Jefaturas está provocando una limitación en los alumnos que podemos presentar a examen, lo que está motivando prórrogas de ERTEs y pone en serio riesgo puestos de trabajo e incluso el cierre de empresas”.
El sector de las autoescuelas apenas se había recuperado de las dos huelgas recientes de funcionarios examinadores y ahora se enfrenta a otro problema de igual o mayor magnitud.
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