Los 10 pecados capitales de los coches con respecto a las motos

La convivencia entre coches y motos, tanto en carretera como sobre todo en el tráfico urbano, no es fácil. La rigidez de circulación de unos frente a la agilidad de las otras provoca situaciones de riesgo inesperadas que no siempre se resuelven con un susto o una alerta. Para reducir estos incidentes se ha lanzado desde ANESDOR (asociación de fabricantes de motos) y la RFME (federación) un documento que ayuda a tomar conciencia de las situaciones más habituales: sabiéndolo podremos prevenirlo. Estos son los 10 pecados capitales de los coches y cómo prevenirlos…

• 1. Circular demasiado cerca

En el tráfico denso es habitual que los coches circulen con escasa distancia de seguridad entre unos y otros. Eso acaba provocando “alcances” (el tipo de accidente más habitual entre coches) que a baja velocidad no suelen tener consecuencias, ni siquiera para el vehículo. Pero el más leve golpe a una moto provocará su caída con el peligro que ello supone para su/s ocupante/s. Si vas en coche, deja más espacio por delante, y si vas en moto y alguien se acerca mucho, indícale que debe quedarse más separado.

2. No facilitar el paso

Cada moto que circula por la ciudad es un coche menos en el atasco: su agilidad ayuda a que el tráfico sea más fluido y por ello cuando un coche le facilita el paso a una moto, se está haciendo un favor a sí mismo además de ser cortés (y también lo es agradecerlo desde el manillar). Ten cuidado si el paso es justo porque a nadie le gusta que le toquen o muevan los retrovisores.

3. No respetar la prioridad de paso

En glorietas, cruces de calle o incluso ante un STOP o Ceda el Paso, las motos tiene la misma prioridad que cualquier otro vehículo. Pero muchos conductores de coche imponen el mayor tamaño y peso de su vehículo en esas situaciones: tenlo presente cuando vayas en moto, no des por hecho que te han visto (porque a veces ni miran) ni tampoco que van a respetar tu prioridad de paso. Para un coche, una moto debería respetarse como un camión.

4. Saltarse semáforos

Cuando un coche llega “justo” a un semáforo ya naranja (o, peor, rojo) y decide no frenar, está poniendo en grave riesgo a las motos que van a cruzarse con él. Las motos suelen estar en primera fila del semáforo y su mayor agilidad les permite salir más rápido cuando éste se pone verde… lo que las expone a un riesgo mayor si alguien se salta el otro semáforo. En moto, asegúrate que el tráfico cruzado se ha parado antes de salir por muy verde que esté tu semáforo.

5. Lanzar objetos o líquidos

Circular en coche es aburrido y estresante, pero eso no justifica que algunos conductores saquen el brazo por la ventanilla o, peor, que lancen objetos por ella: desde un papel a una colilla… Aparte de que es algo denunciable (una falta grave), en moto nos puede provocar una situación peligrosa. Es otro motivo para llevar casco integral y guantes, además de estar atento si llevan las ventanillas bajadas. Otra molestia son los lavaparabrisas mal ajustados, que proyectan líquido demasiado alto.

6. Abrir la puerta sin mirar

Es otro golpe clásico en ciudad que afortunadamente suele ser leve. Si circulamos entre coches en marcha, o entre estos y los aparcados, y alguien abre repentinamente una puerta sin mirar antes, el golpe es inevitable. En coche hay que evitar abrir puertas así y sería bueno popularizar la “maniobra holandesa” (usar la mano opuesta a la puerta obliga a girarse y mirar) que allí sirve para evitar golpes a bicicletas. En moto, evitar circular por esas zonas o hacerlo con mucho cuidado y mirando dentro de cada coche.

7. Adelantar sin mantener suficiente separación

Cuando un coche adelanta una moto, algo que ocurre con frecuencia al tratarse de motos o scooter 125 por ejemplo, puede no respetar suficiente distancia lateral de seguridad. La diferencia de velocidad y el viento pueden hacernos perder la estabilidad, provocando una situación insegura. Los coches deben adelantar manteniendo al menos 2 metros de distancia, y lo mismo se aplica en el caso de motos que adelanten a otras motos pues el problema es el mismo.

8. Realizar giros sin mirar

Además de los alcances, el golpe lateral es el más habitual en el tráfico urbano entre coches y motos. Cuando un coche gira al cambiar de carril o para tomar otra calle, no siempre mira y se asegura de que no venga otro vehículo y en particular una moto. A veces la moto puede estar en un “punto ciego” del coche y aunque el conductor de éste mire, no podrá vernos: evita situarte en esas zonas (tres cuatros traseros) en el tráfico urbano, sepárate ante un cruce, y prepara un dedo en la bocina como aviso si prevés esa situación.

9.Salir de un cruce sin comprobar que no viene nadie

Será un golpe lateral similar al anterior, pero que ocurre cuando el coche no está en movimiento sino poniéndose en marcha. En cruces y accesos de carretera, o ciudad, cuando un coche “asoma” no confíes en que te habrá visto y te respetará. Es posible que no te haya visto (para eso ayuda llevar siempre las luces de cruce encendidas) o que crea que estás lejos… Circular sin exceso de velocidad, y tener un dedo en el freno a punto por si acaso, ayudará a prevenir esto.

10. Salir de un aparcamiento sin cuidado

Las prisas son malas consejeras, y a veces cuando un coche desaparca queda claro que su conductor no tiene mucha paciencia. Tanto en batería, sobre todo si sale marcha atrás, como en línea, un coche desaparcando puede ser un riesgo para una moto que viene circulando por esa calle. Como al salir de un cruce, el conductor puede no haber mirado o no habernos visto: moderar la velocidad al verle arrancar, girar las ruedas o poner marcha atrás es una buena medida preventiva.