En Francia se han propuesto luchar contra la contaminación acústica. Para ello, utilizarán el sistema de “radar” (realmente una cámara con micrófonos) anti-ruido “Méduse”, que multará a aquellos que sobrepasen un número de decibelios predeterminado.
Radar anti-ruido
Este sistema como decimos se basa en una cámara con sensores de audio que, en el caso de las motos pero también cualquier otor vehículo, fotografiará la matrícula trasera del vehículo que supere los decibelios máximos establecidos en ese punto y le impondrá una multa de 135 euros.
Desde el año 2019 se han estado haciendo pruebas con ellos, y ahora estos radares anti-ruido han llegado a Haute Vallée de Chevreuse, una zona muy concurrida que suele estar llena de motoristas por ser una zona de curvas. Los vecinos de la zona han pedido a sus gobernantes una medida para controlar los excesos al paso de algunas de las motos, por lo que a partir de ahora este nuevo radar velará por la tranquilidad de los habitantes de la zona.
Este sistema, desarrollado por la organización medioambiental francesa Bruitparif, también se implantará en el futuro lugares como París, Bron, Niza, Rueil-Malmaison o Toulouse. El radar ha estado en fase de pruebas en lugares como obras o lugares públicos de reunión. Consistía en registrar los sonidos para enviarlos a un ordenador que los analizaba.
Aunque no conocemos el número de decibelios que harán saltar estos radares, sí sabemos que en el Col de la Schlucht cuentan con un límite de 80 decibelios. Lo que sí conocemos con seguridad es el precio de la multa: 135 euros. El radar anti-ruido podría estar implantado en todo el país en el próximo año, si las pruebas son satisfactorias.
En España, el tráfico supone la mayor fuente de ruido por encima de la industria, el ferrocarril y el ocio. Aunque por el momento no hay noticias de que estos radares anti-ruido vayan a llegar a nuestro país, no sería extraño que puedan hacerlo en un futuro como medida para luchar contra la contaminación acústica.
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