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A partir de una Honda CB750F2 Sevenfifty, Jeremy Duchampt ha creado una café racer inspirada en el Mundial de principios de los 90.

Jerem Motorcycles tiene su sede en Béziers (Francia) y es una compañía se ha especializado en la preparación de motos, sobre todo de los años 80 y 90. El ejemplar de estas páginas está basado en la Honda CB Sevenfifty (1992-2002). Podríamos decir que, de alguna manera, fue una de las precursoras (junto con la Kawasaki Zephyr) de la potente tendencia retro que existe en la actualidad. BMW, Honda, Moto Guzzi, Triumph… multitud de fabricantes ofrecen modelos con estética de ayer y tecnología actual. ¿Lo mejor de los dos mundos?

La realización de Jerem Motorcycles es una atractiva café racer que respira a través de cuatro enormes filtros de aire firmados por DNA, que le dan un aspecto muy deportivo y retro al mismo tiempo. A lo que hay que añadir un escape cuatro en uno que sale por el lado derecho. Para completar la estampa, el conjunto depósito-asiento (lo más logrado de la moto en nuestra opinión) fluye desde la tija hasta el colín monoplaza. El asiento forrado en cuero y alcántara es otro de los detalles que aportan un toque vintage a la Honda CB Sevenfifty.

Rothmans café racer: La Honda Sevenfifty más agresiva

Jeremy Duchampt es un artesano galo responsable de Jerem Motorcycles y ya lleva tiempo sorprendiendo con sus trabajos a partir de unidades Ducati, Yamaha y, en este caso, Honda. Quizá uno de los mayores acierto del preparador es su capacidad para crear motos equilibradas y agresivas al mismo tiempo.

En la café racer no faltan unos semimanillares anclados muy bajos y un minimalista faro redondo. La aleta delantera es minúscula, lo que permite destacar a los discos y la llanta. La parte posterior va casi desnuda, pues solo encontramos un pequeño soporte para la matrícula. Aquí también llaman la atención los amortiguadores con depósito separado.

Aparte de los de los colores del depósito y colín, en la moto domina el negro. Así el motor, basculante, botellas de la horquilla, y las llantas van en negro. Mientras que para las pinzas de freno y los depósitos separados de los amortiguadores se eligió el dorado. La decoración está inspirada en los colores Rothmans (plata, azul y oro) que utilizaron a principios de los 90 pilotos como Eddie “Steady” Lawson, Wayne “Cocodrilo” Gardner y Mick Doohan. Una época en la que los grandes patrocinadores del Mundial de Motociclismo eran las compañías tabaqueras.

Jeremy Duchampt ha transformado una humilde Honda CB750F2 Sevenfifty en una arrebatadora café racer que nos lleva a una era gloriosa. Un tiempo en el que, de acuerdo con el cliché, el sexo era seguro y las motos peligrosas… y si no que se lo pregunten a Gardner o Doohan…

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ale.garciamontes
ale.garciamontes@gmail.com

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