Yamaha: Primero gasolina Bio y luego motos eléctricas

El mundo de la automoción está viviendo un momento disruptivo que algunos equiparan a cuando se comenzó a fabricar en serie el modelo T de Ford, el vehículo que popularizó el uso del coche en Estados Unidos. Los fabricantes están inmersos en una carrera por la electrificación y el coche autónomo. El cambio de paradigma es tal que algunos expertos vaticinan que marcas establecidas se quedarán en el camino mientras que otras nuevas ocuparán su lugar.

Entre los cambios que tenemos encima, otra de las variables es la gasolina ecológica o sintética. Una solución por la que ha apostado Porsche. En el mundo hay unos 1300 millones de vehículos con motor de explosión que no van a desaparecer de la noche a la mañana.

Yamaha y la gasolina ecológica

La marca de los diapasones comparte la idea de que hay que apostar por la gasolina ecológica, pues asegura que antes de la electrificación llegarán los combustibles sintéticos. El primer paso lo dará en Asia, donde quiere ofrecer modelos capaces de funcionar con gasolina bio o sintética. Lo que ayudará a ir reduciendo los niveles de CO² a la espera que se popularicen los vehículos (coches y motos) a pilas. A pesar de que la electrificación es imparable, habrá que superar grandes obstáculos como son el precio de los vehículos, la limitada autonomía, los elevados tiempos de recarga (uno de los aspectos más importantes) y la mínima infraestructura en electrolineras.

No solo es Yamaha quien apuesta por los carburantes sintéticos, pues Francesca Milicia, miembro del consejo de administración de Ducati, declaró que: “Estamos buscando soluciones que nos permitan llegar a las cero emisiones o reducirlas al máximo. Una de ellas son los combustibles sintéticos. Otras marcas de nuestro grupo, por ejemplo Porsche, están investigando en este aspecto. Es algo que nosotros también queremos ver a medio plazo”.

Los combustibles sintéticos se producen sin utilizar petróleo. Aquí se incluyen los llamados bio combustibles, basados en bioetanol o que provienen de biomasa. Cuando se queman producen CO² pero no más de lo que se ha extraído con anterioridad del medio ambiente. Yamaha quiere apostar por esta solución antes de que las motos eléctricas se popularicen en el mundo.

“Pese a que tenga que ajustarse a nuevas homologaciones, el motor de combustión interna actual seguirá utilizándose aunque con bio combustible en el depósito”, declaró Yoshihiro Hidaka, presidente de Yamaha Motor, en una reciente entrevista a un medio japonés. La marca ya ofrece en Brasil motos deportivas que funcionan con un combustible que tiene un alto porcentaje de etanol. Una estrategia que planea implementar también en India e Indonesia, dos de los mayores mercados mundiales.

El 80 por ciento de las ventas de Yamaha tienen lugar en Asia. La marca tiene planeado ofrecer antes de 2024 más de 10 modelos eléctricos pero Yoshihiro Hidaka aseguró que: “No tenemos prisa a la hora de ofrecer todo tipo de motos eléctricas en Asia. La falta de infraestructura para ello nos obligará a dar un paso intermedio, que es el empleo de combustibles que sean neutrales en lo que al medio ambiente se refiere”.