Si vas a realizar una escapada estas vacaciones de Navidad, no corras tanto y toma nota de las siguientes recomendaciones para poner a punto la moto. Recuerda que las prisas son malas consejeras y que un vehículo sin revisar puede complicarte esos ansiados días libres. Mejor dedicarle un poco de tiempo a su mantenimiento y viajar tranquilos.
* Unos días antes de poner en práctica lo de “carretera y manta”, se debe dar un “repaso” a la moto para comprobar que se encuentra en buen estado. Lo mejor es que empieces por el motor, verificando que el “corazón” de tu compañera de aventuras no presenta ningún tipo de fuga.
* A continuación, ajusta los niveles del líquido refrigerante. Haz lo mismo con el aceite, pero no mezcles uno de tipo sintético con otro mineral o viceversa. Y, si por kilometraje o estado fuese necesario, sustituye tanto el aceite como el filtro. Todas estas operaciones han de realizarse con el motor en frío y la motocicleta en posición vertical.
* El siguiente paso es comprobar que los neumáticos se encuentran en condiciones óptimas. No te lo tomes a broma, ya que este elemento es el que “conecta” la moto con el asfalto. Una buena forma de verificar que la banda de rodadura no está “al límite” (esto es, con unas ranuras cuya profundidad sea igual o inferior a 1,6 milímetros) es realizando la prueba del euro. Coloca la moneda entre los surcos: si la coronilla dorada queda a la vista, debes reemplazar los neumáticos inmediatamente, por tu seguridad y para evitar ser multado (pueden sancionarte con doscientos euros por cada cubierta en mal estado).
* En cuanto a la presión, procura que sea la misma que indica el fabricante y revisarla, de ser posible, con los neumáticos fríos.
* Por cierto, el desgaste de los neumáticos puede deberse a un mal funcionamiento de las suspensiones. Presta atención a su estado y reglaje, pues de ello dependerá que la moto sea más o menos estable.
* Llegamos a la transmisión. Revisa el tensado, el engrase, la holgura entre eslabones, el piñón de ataque y corona, etc. Y también, ojo con el nivel del lubricante y los kilómetros transcurridos desde el último cambio de aceite, si fuese por cardán.
* Lógicamente, no debes descuidar todo lo relativo a los frenos: conservación de los discos y las pastillas y nivel y estado del líquido del sistema.
* Tampoco te olvides de comprobar que todos los grupos ópticos y los intermitentes funcionan correctamente, algo vital para garantizar una buena iluminación durante el viaje y asegurarte de que tanto tú como las maniobras que realices son visibles para el resto de usuarios de la red viaria.
* Ya que nos referimos a la visibilidad, es recomendable limpiar la cúpula de la moto, pero siempre con gamuzas y líquidos que no dañen la pantalla.
Si no tienes tiempo para realizar todas estas operaciones o, simplemente, no eres un “manitas”, lo mejor es que confíes tu moto a los profesionales de un centro especializado.
Bueno, ya sabes cómo poner a punto la moto, en perfecto estado de revista y en condiciones para afrontar el esperado viaje de vacaciones con total seguridad. Pero ahora hace falta preparar el itinerario. Puedes echar un vistazo a algunos de nuestros consejos sobre rutas por Madrid, Barcelona y Andalucía.
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